Inyecte motivación y reciba compromiso

Angie López noviembre 22, 2016

Los colaboradores felices se comprometen con su trabajo, se enamoran de la compañía y son altamente productivos, llevando a la empresa al éxito

Si quiere que sus colaboradores se pongan la camiseta, se “enamoren” de la empresa y realicen cada una de sus responsabilidades con pasión procure que sean felices en el trabajo, lo cual va más allá de ofrecerles un jugoso salario.

El dinero es importante, pero lo es más un ambiente laboral sano, flexibilidad de horarios y teletrabajo, planes de incentivos, capacitaciones y posibilidades reales de crecimiento, entre muchas otras acciones que buscan dar felicidad al colaborador.

Pero lo que definitivamente da bienestar al colaborador es que sienta que su trabajo, sin importar cual sea la posición que ocupe, tiene un impacto tal en la organización que gracias a él se cumplen los objetivos de la compañía hasta conducirla al éxito.

“Las personas son felices en su trabajo, siempre y cuando se sientan útiles, y siempre que sientan que su trabajo tiene un aporte al sueño de la organización. Cuando las personas no sienten que su trabajo aporta no pueden ser felices porque a nadie le gusta perder el tiempo”, cuenta Enrique Lozano, gestor de Ideas de I do Consulting.

50/50

Para Lozano, la felicidad corporativa está alineada a otro concepto y es la fidelización del talento, que busca que las personas se enamoren de su lugar de trabajo, lo cual es complemetamente diferente a la retención (retener ya tiene una connotación negativa). Así, como si se tratase de una relación de pareja, la felicidad y la satisfacción laboral deben brindarse en ambas vías, es decir, es una responsabilidad de las empresas, pero también del colaborador. Además, tiene que haber compensación, reconocimiento, respeto y admiración, entre otros aspectos.

“Es una responsabilidad bipartita. La empresa debe ser conciente de lo que tiene qué hacer, pero que también que debe generar en el empleado una cultura que lo motive a ir tras eso que le gusta y le hace feliz. A ti nadie te puede hacer feliz, por más que sea Google o Apple, esos grandes íconos que nos han vendido, si no logras conectar con los objetivos de la empresa y del negocio”, asegura Lozano.

Para el experto, la felicidad corporativa no significa caminar juntos por un valle lleno de flores, por el contrario, los procesos de felicidad son muy difíciles para las personas porque implican cambios muy profundos en la forma de ver su trabajo.

Victoria Scott, gerente de Compensación y Beneficios de PwC, coincide con Lozano en que la felicidad es un 50/50. “Primero tengo que estar feliz conmigo mismo y luego voy a poder observar y entender todo aquello que la empresa me da”, agrega.

Según Scott, la felicidad no se crea, sino que viene desde cada uno de los colaboradores de la organización y no de la empresa, sin embargo, algunos aspectos como el ambiente laboral que se desarrolla, las facilidades que brindan, la innovación, los retos y la promoción del crecimiento, entre
otros, pueden ir haciendo felicidad, pero eso va de acuerdo a lo que la persona necesite.

Scott aclara que el salario no es un factor que lleve a la felicidad, sino que es un medio por el cual las personas satisfacen necesidades básicas, por tanto, la satisfacción va más allá de eso. “Lo que las empresas pueden hacer es conocer muy bien a sus cola boradores y entender muy bien cuáles son sus necesidades y cuáles puede cubrir”, añade.

Muy personal

Tatiana Lizano, directora general de LIVE 13.5 Costa Rica, comenta que la felicidad en la empresa es la capacidad que tiene una organización para brindar a sus colaboradores condiciones y oportunidades que les permitan sacar la felicidad organizacional se logra a través de la creación de un entorno laboral que busque fortalecer el compromiso, que contribuya a dar sentido y propósito en las funciones de los colaboradores para un bien común y personal y que contribuya al fortalecimiento de relaciones confiables.

La experta explica que estudios han demostrado que las personas que se sienten más felices en su trabajo porque hacen lo que les gusta y se apasionan por su trabajo incrementan notablemente su productividad.

“Hay un concepto llamado atención plena o flow, que indica que cuando las personas están haciendo lo que les apasiona logran un estado de estar en el aquí y el ahora. Este es el estado que ocurre cuando estamos inmersos en una actividad y disfrutamos tanto lo que estamos haciendo que pareciera que el tiempo vuela o no nos damos cuenta del pasar del mismo. El estar concentrados en este estado produce un estado de creatividad y productividad elevado. Así también elimina el estrés, reduce el dolor, la ansiedad o el aburrimiento”, recalca Lizano.

Jóvenes impulsan el cambio

Dahiana Arias, gerente país de ManpowerGroup Costa Rica, afirma que los millennials son quienes están motivando las nuevas tendencias de felicidad corporativa y apuntan a que las empresas realicen políticas de bienestar y estén cada vez más ajustadas a estilos de vida flexibles, que más allá del ocio, busquen el equilibrio entre el trabajo y la vida personal.

“La clave para conseguir esta felicidad es tener claridad de los gustos y preferencias de los colaboradores, apertura a la flexibilidad o innovación y considerar la capacidad de la empresa en brindar lo que desean”, señala Arias.

“La felicidad en el trabajo hace que la persona se sienta motivada, con ganas de asistir al trabajo, dar lo mejor de él o ella al momento de realizar sus funciones lo cual normalmente hace que sea más productivo en su trabajo; ya que, no solo está cumpliendo con las tareas asignadas, sino que lo hace complacidamente y da como popularmente se dice la milla extra”, agrega.