Colonias, lociones, fragancias y esencias se han convertido en complementos de belleza indispensables tanto para las mujeres como para los hombres.
Algunos son fuertes y poderosos, otros son sutiles y románticos, también están los más frescos y radiantes. Lo cierto es que un perfume está hecho para generar sensaciones en el evanescente
reino de los olores.
disponibles para crear un perfume.
Descubrir y percibir el mundo y a la gente que nos rodea a través del sentido del olfato es todo un arte que pocos ponen a prueba.
El éxito de algunas fragancias reconocidas mundialmente radica en el hecho de que, a pesar de los años, logran voltear miradas y causan suspiros, más cuando esa huella de aroma evoca en otros una grata sorpresa o la imagen de un ser querido.
“El perfume es una prolongación de nuestra personalidad, debemos tomar en cuenta sus características y mantener un guardarropa de fragancias según nuestro estado de ánimo y como nos gustaría agradar cada día”, afirma Claudio Ruiz Vega, maquillista y experto de Guerlain en Costa Rica.
Y es que los aromas de las fragancias que cautivan se caracterizan por incluir en sus composiciones las cantidades precisas de ingredientes exquisitos e inolvidables.
En unos predominan flores blancas y poderosas que se mezclan con una fusión de frutas jugosas y maderas nobles. Otros se componen de fragancias frutales y florales sobre un sostén denso de pachulí.
Resinas dulces e inciensos, delicados aromas orientales, frutos rojas, regaliz, aceites esenciales e infinidad de aromas que derivan de especias, logran generar fragancias memorables.
“En lo que concierne a la familia olfativa siempre reinará el corazón de la fragancia, es decir, el nivel en el que predomina la originalidad de ella. Si es floral, rosa, jazmín y lirio son infaltables en la fórmula. Una fragancia amaderada se complementa bien con sándalo, y especiada logra su toque particular gracias a la pimienta y algunos cueros”, explica Ruiz Vega.
De acuerdo con los conocedores, cada año se lanzan al mercado mundial en promedio unos 300 perfumes, pero a duras penas sobreviven media docena.
Aprenda a elegir su fragancia
Cuando compramos un perfume todos queremos que perdure en nuestra piel.
Crear una estela de olor tiene su ciencia y quien aprende a desarrollarla puede estar seguro de que será reconocido por la fragancia que desprende.
“El primer consejo para elegir el perfume es no dejarse llevar por el hecho de que a alguien conocido le quedó bien, entonces a mí me va a funcionar igual. La elección tiene mucho que ver con el Ph (grado de acidez) de la persona, con lo que comemos y con el aceite natural que nuestro cuerpo desprende”, explica María de los Ángeles Quant Zúñiga, experta en ventas y mercadeo por más de 30 años para los Duty Free de L’Oréal Produits Deluxe International en Miami.
Un dato interesante es que el perfume necesita el calor del cuerpo para desprenderse de todos sus aromas. Esas zonas ideales son los llamados puntos calientes donde más palpita la sangre.
Según Quant, “un perfume seprueba sobre las pulsaciones, ya sea detrás de las orejas, en el pulso o las muñecas y en la sienes”. Otros puntos que generan buen calor son los tobillos, el ombligo, el pecho y la coronilla.
La elección correcta de una fragancia también tiene mucho que ver con la hora en que se compra.
“Si vas a comprar un perfume que nunca has usado hay que buscarlo por la mañana. Lo ideal es ir sin ninguna fragancia puesta y no debe atenerse a la prueba que le dan en la tienda en un papelito. Hay que probarlo en la piel directamente porque 10 minutos después de aplicado ya huele diferente”, afirma Quant.
Tipos de perfume
En el mundo de los aromas existen más de 5.000 componentes disponibles para crear un perfume. Las aguas son ideales para el día mientras que el perfume por su nivel de concentración es el rey de la noche.
Agua de perfume: Es perfume en una concentración de esencia menor, ronda entre 10% y 15% y está diluida en alcohol etílico de 90 grados.
Agua de baño: También es conocida como parfum de toillete, diluido en alcohol de 85 grados.
Agua de colonia: Fragancia suave y con baja concentración de esencias (varía de 3% a 5%) su grado alcohólico oscila entre 70% y 80%.
Agua fresca: Es refrescante y perfumada con muy poca esencia cítrica, es adecuada para la vida al aire libre, por eso muchas marcas la llaman eau de sport. Tiene un porcentaje de esencia bastante
bajo, de 1% a 3% y siempre está diluida en alcohol de 70 u 80 grados.
Esencias o extractos: Es el perfume en su concentración más alta, por eso es el más caro (del 15% al 30%; el porcentaje varía según las marcas).
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