La compañía multinacional cumple siete años de estar en Costa Rica.
Empaques, sacos y bolsas son algunos de los productos, que tal vez usted verá a diario y desconoce que se fabrican en Costa Rica, por la compañía multinacional Smurfit Kappa, que cumple siete años de estar en el país.
La presencia de esta multinacional en Costa Rica inició en el 2015, cuando decide adquirir las operaciones de Grupo Cybsa, una empresa familiar centroamericana con sede en El Salvador.
“En ese momento Smurfit Kappa a nivel global compra toda la operación que ellos tenían, principalmente en El Salvador, con tres plantas, en Costa Rica con dos y unas oficinas comerciales en la región”, recuerda Óscar Sabogal, gerente general de Smurfit Kappa en Costa Rica.
A partir de ese instante la operación de la compañía en la región centroamericana toma un nivel diferente.
“Durante estos siete años, nos hemos encargado de cambiar en gran medida lo que es la cultura corporativa de las compañías y transformarlas en la cultura Smurfit Kappa a nivel global, que ha sido la tarea en estos últimos años”, afirma Sabogal.
Operaciones en Costa Rica
En Costa Rica, la empresa tiene toda la operación en la Lagunilla de Heredia, ahí se ubican las plantas de bolsas, la de corrugados y la de plegadizas.
“Nosotros atendemos principalmente tres sectores, el sector más grande es el farmacéutico y de dispositivos médicos. En Costa Rica, trabajamos con las principales empresas farmacéuticas y de dispositivos médicos, muchas de las cuales están dentro de zonas francas. De hecho, todas las cajitas de panadol, para niños, para grandes, que salen al mercados son casi siempre hechas por nosotros en un 100%”, explica el gerente.
También atienden el sector alimenticio y están incursionando en algunos sectores agroindustriales para exportación de productos agro.
“Las operaciones nuestras dentro del grupo tienen una misión muy grande que es abastecer muchísimos mercados y entre esos el principal es Costa Rica. Desde Heredia atendemos a 14 países de la región, llegamos desde Guatemala hasta Panamá, en todo Centroamérica. Tenemos clientes en México y atendemos casi todo el Caribe. Tenemos una vocación de exportación bastante grande para la planta, estamos enfocados en crecer a nivel de la región”, comenta Sabogal.
Cultura organizacional
La principal evolución que ha tenido la empresa en estos años ha sido en su cultura organizacional, en especial, en la parte de seguridad de sus plantas, donde han tenido años sin accidentes.
“La planta de folding acaba de cumplir 1000 días sin accidentes incapacitantes, es un gran logro. En la planta de sacos teníamos 4 años de no tener accidentes, hasta que el año pasado un trabajador se resbaló en una escalera y se cayó sin consecuencias, pero ya cumplimos un año, de abril a abril, sin accidentes nuevamente en la planta”, asegura Sabogal.
La planta de folding, que atiende las empresas farmacéuticas y de dispositivos médicos cuenta la certificación FSSC-22000 de inocuidad alimentaria, una norma que los pone en lo más alto.
Durante la pandemia del COVID, las plantas de adoptaron rápidamente los protocolos, los cuales conservan hasta hoy en día.
Otro cambio ha sido en temas de inclusión, actualmente cuentan con mujeres en todas las plantas en puestos operativos. “Tenemos supervisoras de producción en dos de las tres líneas, tenemos mujeres en todos los comités de las plantas, incluso en el comité de gerencia, ya no hay ningún comité en el que no tengamos mujeres”, comenta Sabogal.
Además, han entrenado a su personal en todos los campos y les han dado la oportunidad de seguir estudiando con cursos para que concluyan su bachillerato, y hasta han otorgado becas para que continúen con sus estudios universitarios.
Cuidando el ambiente
El cuidado del medio ambiente y de las comunidades a su alrededor es muy importante para Smurfit Kappa por eso se han fijado el objetivo de bajar la huella hídrica de su planta.
“Queríamos tener en Costa Rica una planta donde toda el agua que usamos sea recuperada y sea devuelta en mejores condiciones a las que la estamos tomando de la Municipalidad. El proyecto es bastante ambicioso, lo arrancamos en mayo y los resultados han sido fantásticos, el agua es de una calidad tremendamente buena”, explica Sabogal.
El proceso consiste en que todas las aguas que usan van a un tanque recolector, de ahí pasan a una etapa de eliminación de contaminantes, posteriormente a un reactor biológico, donde microorganismo, que están diseñados para eso, retiran de esa agua todos los componentes que pueden generar algo de contaminación, para luego pasar por un sistema de filtración donde el agua sale completamente clarificada.
“Esas aguas las vamos a incorporar al proceso de las plantas para que cada vez captemos menos agua de la Municipalidad hasta volvernos prácticamente un sistema cerrado, eso nos ayudará a reducir la huella hídrica”, indica Sabogal.
En cuanto a la emisión de la huella de carbono, hace un par de años hicieron una inversión muy grande cambiando los quemadores de la caldera principal, el combustible que usaban por gas y ahora sus chimeneas dejaron de soltar partículas de CO2 al ambiente.
Viendo al futuro
Sus planes de crecimiento a nivel regional los han llevado a invertir en dos equipos nuevos.
“Estamos instalando una impresora alemana que nos permitirá doblar la capacidad que tenemos actual en nuestra planta de folding, es una impresora de última generación con acabados impresionantes que nos llevará a ser líderes en todo lo que tiene que ver con artes gráficas”.
El año pasado, hicieron una gran inversión en la planta de sacos, más ahora que se está reemplazando las bolsas plásticas por las de papel con la adquisición de una impresora nueva que les permite imprimir casi calidad fotográfica sobre estas bolsas.
Este crecimiento de las plantas les está demandando una mayor contratación de personal. Para eso están lanzando una fuerte campaña en su Programa Trainee, donde buscan en las universidades a estudiantes con buen nivel académico para capacitarlos y luego incorporarlos a su organización.
Con estas inversiones en las plantas, Smurfit Kappa, pone todos sus esfuerzos en crecer a nivel centroamericano.
“Los primeros años nos dedicamos a organizar la casa, a tener todas las estructuras y lo que necesitábamos internamente. Estos últimos años nos estamos dedicando más a que nos conozcan en el mercado, somos una compañía de empaque que trabaja B2B con las empresas”, dice Sabogal.
“Nos vemos como una compañía que seguirá acompañando todos esos crecimientos orgánicos de las empresas en Costa Rica, también nos vemos llegando a todos los países de la región, nos vemos muy integrados con las otras operaciones en un crecimiento bastante dinámico con muy buenas posibilidades de inversión”, concluye el gerente general.
- Marca del Mes: Ferrari, velocidad, potencia y lujo - 20 abril, 2024
- Johnson & Johnson, innovación constante en la salud - 16 abril, 2024
- La Enfermedad Renal Crónica, una enfermedad silenciosa - 1 abril, 2024
