La compañía ve con optimismo las oportunidades que le ofrece la pandemia y trabaja para continuar con el marcado crecimiento experimentado desde el 2014.
«Cada obstáculo es una oportunidad y esta pandemia nos ha abierto un sinnúmero de posibilidades, desde abrir mercados en nuevos países, hasta mejoras en nuestros procesos de producción y trabajo en general”.
Así lo afirma Paul Julio Ekman, director general de Alas Doradas, quien dice que su compañía ha tenido que aprender “tan rápido, que no podemos sino agradecer por el tipo de industria en el que estamos y el apoyo de nuestros empleados para adaptarse a las situaciones que nuestro camino ha enfrentado”.
La empresa de fabricación de papel absorbente y plano con sede en El Salvador y que distribuye en toda Centroamérica, Panamá, República Dominicana y Puerto Rico, fue adquirida en su totalidad por el Grupo Coen en el 2011. Sus marcas de papel higiénico Encanto, Carezza y ECO y sus toallas y servilletas Carmessí pasaron de tener una cuota de mercado del 5,5%, en el 2014, a un 16% al cierre del 2020. “Las ventas en ese mismo periodo se han duplicado, vendiendo US$42 millones en el 2014 y cerrando este año con US$83 millones, todo bajo la dirección y liderazgo de nuestro presidente Paolo Coen”, dice Ekman.
Responsabilidad con los colaboradores
Desde que notaron la cercanía de la pandemia, Alas Doradas instaló protocolos de seguridad adicionales a los que ya manejaba, de manera que tiene implementadas todas las medidas necesarias, que incluyen la toma de temperatura antes de ingresar a la planta, disponibilidad de personal médico las 24 horas del día para examinar algún empleado o visitante, instalación de túneles de sanitización tanto para vehículos como para personas, dispensadores de alcohol gel, lavamanos y pediluvios al alcance de cada colaborador en todas las entradas y salidas en los diferentes edificios del complejo, equipo de seguridad (mascarillas, lentes, entre otros) y mantenimiento del distanciamiento social.
“Nosotros como empresa siempre hemos trabajado a favor de los demás. Ahora, más que nunca, estamos cuidando de nuestros colaboradores, cerciorándonos de que los empleados con mayor riesgo se queden en casa y que a estos y sus familias no les falte nada. Además, todos nuestros colaboradores tienen todo el equipo de protección necesario para la pandemia y así proteger a sus familias. Pero no nos quedamos solo con colaborar en casa, estamos apoyando aún más a nuestras comunidades, mediante donaciones de producto para apoyar a sectores vulnerables, coordinando estos esfuerzos a través del gobierno y de entidades sin fines de lucro”.
El personal administrativo de Alas Doradas está trabajando de forma remota desde su casa, gracias a la instalación de los equipos y conexiones necesarias a Internet. “Ya se poseían todos los recursos tecnológicos necesarios para el trabajo a distancia y este fue el momento ideal para aprovecharlos. Además, hemos contratado cuatro autobuses nuevos para brindarle transporte al 100% de nuestro personal”, explica Ekman.
Empresa verde y responsable
Alas Doradas se caracteriza por que sus productos son trabajados con base en materia prima 100% reciclada. “Somos una empresa verde y esto nos diferencia de los demás, tanto con nuestro producto, como con sus precios. Además, somos una empresa de acción, planeamos y ejecutamos de forma rápida y constante, lo cual nos da muchas ventajas en el mercado”.
En materia de responsabilidad social empresarial, Alas Doradas brinda a sus colaboradores condiciones laborales competitivas, programas de desarrollo, transporte, almuerzo y cena gratis, uniformes que incluyen calzado, clínica médica en sus instalaciones tanto para los colaboradores, como para sus hijos, becas escolares y universitarias para sus empleados y cuenta con el programa “100% Bachiller”, con el objetivo que todos los empleados que quieran obtener su título lo puedan alcanzar.
Además, hace un uso eficiente de los recursos naturales, trabaja con producto 100% reciclado, tiene una planta de tratamiento de aguas residuales y cuenta con un vivero in house, para apoyar campañas de reforestación que produce 15.000 árboles de especies frutales y forestales de El Salvador.
“Como empresa vemos un futuro prometedor. Contamos con el respaldo de Grupo Coen y tenemos claras directrices de nuestro presidente Paolo Coen para hacer crecer la empresa en todo sentido, tanto en su capacidad productiva, como en el desarrollo de nuestro capital humano. Este año, adquirimos una nueva convertidora y, en el 2021 haremos una fuerte inversión de capital en la adquisición de una nueva máquina papelera, que nos permitirá duplicar nuestra producción y servir a todos nuestros mercados con un producto cada vez mejor”.
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