El envío de remesas ha incidido en el alza de créditos de consumo. Sin embargo, el crédito para vivienda sigue estancado, pese al aparente «boom» inmobiliario.
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La banca salvadoreña otorgó a diciembre de 2023 un total de créditos por $16.190,5 millones una cifra que creció 3,8% más respecto al año anterior.
De ese monto, el 33.6% son créditos destinados al consumo. Este sector es uno de los que más creció, según muestra el ranking bancario elaborado por la Asociación Bancaria Salvadoreña (ABANSA).
De acuerdo con estos datos, la banca otorgó un total de $5.438,5 millones en préstamos al consumo, $349 millones más que el año pasado.
El monto representa un aumento de 6,9 % respecto a 2022, cuando la banca aprobó créditos por $5.089,5 millones a clientes que quieren comprar vehículos, hacer viajes o financiar cualquier otro gasto que necesiten.
“El crédito ha crecido, pero otros años creció a tasas de 10%. Las empresas redujeron su demanda y se ha compensado con créditos de consumo”.
Luis Membreño, economista.
La otra porción importante de créditos ha sido para el sector vivienda pues al cierre de 2023 otorgó $2.744,1 millones, $91 millones más que en 2022.
Ambos sectores representan el 50% del total de toda la cartera de préstamos otorgada por la banca.
Sin embargo, el crecimiento en créditos totales de 2023 fue menor que el reportado en años anteriores. En 2022, por ejemplo, el crédito creció 10,4 % y en 2021, aumentó 6,3%, según los reportes anuales de ABANSA.
Según explica el economista Luis Membreño, antes de la pandemia, las empresas estaban requiriendo créditos para invertir, pero pasada esa etapa, la demanda se ha reducido, y eso ha dado pie a que haya más créditos a consumo.
El incremento en el crédito de consumo de 2023 podría estar relacionado, además, al envío de remesas, que ha dado más recursos a los salvadoreños. Según el Banco Central de Reserva (BCR), a diciembre del año pasado El Salvador recibió $8.181 millones, una cifra récord de las últimas dos décadas.
Sin embargo, el crédito para empresas se ha reducido, debido a que las compañías no está invirtiendo o han sido afectadas por la inflación y por esa razón, se ha reforzado el crédito al consumo.
Los datos muestran que el crédito para la industria manufacturera tuvo una caída de -4% y el de construcción, una reducción de -1,9%
Para el economista Otto Boris Rodríguez, las señales del acceso al crédito se asemejan a las del IVAE (Índice de Volumen de Actividad Económica), donde «no hay una tendencia consistente hacia la mejora; hay más bien un entorno dispar que induce a pensar que sigue siendo adverso para varios sectores de la economía, entre ellos la Inversión Extranjera Directa (IED)«, afirmó.
“El crédito de vivienda crece solo 3,4%, es decir, $91 millones; muy poco para el boom inmobiliario que se supone que está sucediendo”.
Otto Boris Rodríguez, economista.
Rodríguez señala que la preocupación viene por el lado del crédito al sector industrial que cayó $64 millones (-4%) y que, para él, » refuerza la idea que las dificultades del sector observadas en el IVAE. Estos elementos están coincidiendo con la salida de maquilas y los bajos niveles de IED», afirmó.
El economista recuerda que el sector exportador se contrajo durante 2023, de ahí que el acceso al crédito al sector industrial es un indicio de cómo va la economía.
En ese sentido, Rodríguez también coincide con Membreño en que el crédito de consumo es el que está impulsando los créditos totales, «dado que es la cartera más grande del portafolio de créditos; y que se refuerza además, con el crecimiento moderado de las remesas familiares. Situación que también coincide con la expansión del sector comercio, como es de esperar», señaló.
Vivienda
El crédito a vivienda es otro rubro que aumentó 3,4% respecto a 2022, pero «sigue estando deprimido por varios años», según dijo Membreño, quien recuerda tasas de crecimiento mayores.
Y explica este bajo crecimiento a un aumento en el precio de la vivienda que ha sido un factor de desánimo para quienes quieren aplicar a un crédito para vivienda.
Rodríguez también señala ese punto: «el crédito de vivienda crece solo 3,4%, es decir, $91 millones; muy poco para el boom inmobiliario que se supone que está sucediendo. Un boom que también contrasta con la contracción del crédito al sector construcción de 1,9%, con $17 millones menos», señaló.
Según la Oficina de Atracción de Inversiones (Invest), los salvadoreños en el exterior están muy interesados en adquirir viviendas en el país, lo que a juicio de expertos arquitectos como Jorge Regazzoli está incidiendo en el encarecimiento de la vivienda. Ante esto, el profesional ha propuesto una serie de medidas que reduzcan el precio de las viviendas, entre ellas está un mayor acceso al crédito.
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