13 noviembre, 2015

La fundación de la Universidad Francisco Marroquín

Durante muchas décadas, en Guatemala hubo un monopolio estatal sobre la educación superior, el cual fue eliminado cuando se establecieron cuatro universidades privadas en el país, a partir de 1961.

Ayau Cordón deseaba diseminar la filosofía liberal entre los guatemaltecos, principalmente los fundamentos jurídicos de una sociedad de personas libres y responsables y de la economía de mercado. Con eso mente, nació del CEES la idea de fundar una universidad que difundiera las libertades. El liberalismo no era bienvenido en Guatemala y los integrantes del CEES eran calificados de radicales.

El empresario Guatemalteco Dionisio Gutierrez, en una de sus charlas en la Universidad Francisco Marroquín. — El empresario Guatemalteco Dionisio
Gutierrez, en una de sus charlas en la
Universidad Francisco Marroquín.

La universidad inició su primer calendario académico el 15 de enero de 1972. Su misión era y es difundir los principios jurídicos, económicos y éticos de una sociedad de personas libres.

El 8 de julio de 1988, luego de 16 años en el cargo, Ayau Cordón dejó la rectoría. Era consciente de que la institucionalización de la UFM, y su permanencia a través del tiempo, solo podía lograrse si delegaba su dirección a las generaciones venideras. El elegido para continuar el trabajo fue el economista Fernando Monterroso. El Comité de Fiduciarios de la UFM luego nombró a Ayau Rector Emeritus a perpetuidad.

El 19 de septiembre del 2010, Mary Anastasia O’Grady, columnista estrella del Wall Street Journal, escribió una artículo que tituló “Manuel Ayau: Champion of Liberty” (Manuel Ayau: Campeón de la Libertad). La persona que abrió los ojos de Latinoamérica sobre la verdadera fuente de la prosperidad. En ese homenaje a este gran centroamericano, O’Grady explica en muy pocas palabras la grandeza de quien en vida fue Manuel Ayau, un verdadero creador de riqueza en nuestra región centroamericana.

Al morir, el 4 de agosto de 2010, Manuel Ayau Cordón deja una profunda huella en el Itsmo. Su impacto fue mundialmente reconocido. Sus acciones se asumen como un enorme legado. Sus obras escritas viven, ya que Manuel Ayau Cordón escribió más de 2.500 artículos en los principales medios de comunicación de Guatemala, como Prensa Libre, y de Estados Unidos, como el Wall Street Journal. Fue además autor de distintos libros sobre economía entre los cuales destacan: Cómo mejorar el nivel de vida, De Robinson Crusoe a Viernes, Mis memorias y mis comentarios sobre la fundación de la Universidad Francisco Marroquín y sus antecedentes, El comercio, La década perdida, El proceso económico, No tenemos que seguir siendo pobres para siempre, Un juego que no suma cero (Not a Zero-Sum Game) y La misa.

Como una de las miles de personas que fueron impactados por sus obras y hechos, solo me queda agradecerle y rendirle tributo a este gran amigo, centroamericano de corazón, chapín hasta los huesos y un verdadero creador de riqueza en nuestra región.

Descansa en paz gran sensei.