La visita es el último movimiento en el tablero geopolítico, mientras Biden busca más aliados frente a gobiernos cada vez más agresivos en Moscú y Pekín.
El presidente Biden recibió con honores al primer ministro Narendra Modi de India en la Casa Blanca en una visita de Estado llena de «pompa», con el objetivo de cautivar a la nación más poblada del mundo mientras Estados Unidos navega conflictos con Rusia y crecientes tensiones con China.
Biden celebró el ascenso de India con una muestra extravagante de amistad marcada por bandas de música, guardias de honor y un saludo de 21 cañonazos en el South Lawn, seguido de una reunión en la Oficina Oval y una gala de cena de Estado.
«Siempre he creído que la relación entre Estados Unidos e India será una de las relaciones definitorias del siglo XXI», dijo Biden a la multitud reunida en el South Lawn, «dos naciones orgullosas cuyo amor por la libertad aseguró nuestra independencia, unidas por las mismas palabras de nuestra Constitución, las primeras tres palabras, ‘nosotros el pueblo'».
Modi agradeció a Biden por el honor de la visita de Estado y sugirió que las dos naciones podrían abordar desafíos internacionales juntas. «En la era post-Covid, el orden mundial está tomando una nueva forma», dijo a través de un traductor. «En este período de tiempo, la amistad entre India y Estados Unidos será fundamental para fortalecer al mundo entero».
La visita es el último movimiento en el tablero geopolítico mientras Biden busca más aliados frente a gobiernos cada vez más agresivos en Moscú y Pekín.
India, que se mantuvo firmemente no alineada durante la Guerra Fría, se ha negado a unirse a la coalición liderada por Estados Unidos que ayuda a Ucrania en su guerra contra las fuerzas rusas invasoras. Y aunque comparte cierta enemistad hacia China, no ha suscrito completamente la estrategia de Washington para tratar con el gigante asiático.
India, cuya población recientemente superó a la de China para liderar el mundo, representa quizás la más importante de las naciones del llamado Sur Global que Biden está persiguiendo, tanto por su potencial económico como por su posición geopolítica. Y aunque Modi no se refirió directamente a esto en sus propias declaraciones en la ceremonia de llegada, hizo alusión al creciente poder de India, mencionando su población de 1.400 millones tres veces en solo unos minutos.
Para destacar sus lazos, los dos líderes planeaban anunciar una larga lista de iniciativas que promueven la cooperación en telecomunicaciones, semiconductores, inteligencia artificial y otras áreas, según funcionarios de la administración. Modi tenía la intención de firmar los Acuerdos Artemis, un conjunto de principios que rigen la exploración pacífica de la luna, Marte y otros cuerpos celestes, y ambos anunciarán una misión conjunta a la Estación Espacial Internacional en 2024.
Entre los acuerdos más concretos que se anunciarán, dijeron los funcionarios, habrá un acuerdo entre General Electric y la estatal Hindustan Aeronautics Limited para fabricar en India motores F414 utilizados para impulsar el Boeing F/A-18E/F Super Hornet. Ambas partes también anunciarán que India procederá con la compra de drones MQ-9B Predator, valorada en US$3.000 millones , de General Atomics.
Las ventas de equipo militar pueden ayudar a India a alejarse aún más de los proveedores rusos de armas, pero por lo demás, los funcionarios que adelantaron la visita no ofrecieron indicios de que Modi se acercaría más a respaldar a Ucrania en la guerra, ni hubo ejemplos concretos de una mayor cooperación para contrarrestar los movimientos asertivos de China en la región Indo-Pacífico.
Los funcionarios de la administración Biden sugirieron que la reunión era solo un paso en la evolución de la postura de India sobre la guerra en Ucrania, como parte de lo que caracterizaron como «modificar el curso del compromiso de India», para que Nueva Delhi pueda ser útil en fomentar la diplomacia cuando llegue el momento de las negociaciones.
Modi, quien antes de convertirse en primer ministro le fue negada una visa estadounidense debido a su papel en unos disturbios religiosos mortales en su estado natal, estaba claro que Biden estaba adoptando un enfoque «suave» ante los retrocesos en la democracia en India, donde el gobierno ha reprimido la disidencia y perseguido a los opositores. En sus palabras de bienvenida, Biden describió a los dos países como democracias comprometidas con valores universales sin mencionar directamente la creciente represión de grupos minoritarios y voces opositoras en India.
Consideraron una victoria que la administración había persuadido a Modi, quien famosamente se niega a ofrecer conferencias de prensa, a reunirse con periodistas junto a Biden, como la mayoría de los principales líderes mundiales hacen cuando visitan la Casa Blanca.
La escena en el South Lawn por la mañana resaltó el creciente papel de los estadounidenses de origen indio en Estados Unidos, ya que una multitud de miles de personas se reunió en un día sombrío y nublado para aclamar la visita del primer ministro y corear «¡Modi, Modi!»
Fuente: New York Times
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