El estudio resalta nueve factores que serán claves para el diseño de una política turística más flexible y que se adapte más rápido a los cambios.
La Facultad de Ciencias Empresariales y Hospitalidad de la Universidad Latina de Costa Rica y el investigador y economista Victor Umaña, llevaron a cabo una investigación, para determinar los principales factores que han perjudicado el desarrollo del turismo en Costa Rica y así, de manera conjunta con distintos sectores, contribuir al planeamiento estratégico para dicho sector en la etapa de transición del COVID-19. Con este estudio llevado a cabo a finales de 2020 e inicios de 2021, se pretende hacer llamado a todos los niveles para que tomen medidas políticas sólidas y coordinadas para mitigar los impactos y apoyar la recuperación.
Este estudio forma parte de la nueva visión institucional de la Universidad Latina de Costa Rica, de convertirse en una universidad de impacto nacional, y de desarrollar profesionales con conciencia global que puedan elevar la competitividad de Costa Rica y del proyecto Iniciativas ULatina, el cual tiene como objetivo, realizar una serie de informes y estudios, con el fin de brindar información periódica para tomadores de decisión del sector público y privado y así analizar los determinantes de la competitividad de Costa Rica para los distintos sectores e industrias.
En el país, el turismo genera divisas, apoya empleos y negocios, impulsa el desarrollo regional y sustenta a las comunidades locales. Antes del impacto de la pandemia, este sector contribuía directamente con el 4,4% del PIB, el 6,9% del empleo y el 21,5% de las exportaciones de servicios de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
De acuerdo con Rosa Monge Monge, Rectora de la Universidad Latina de Costa Rica, este proceso de investigación forma parte del compromiso de la institución por generar un impacto positivo en la sociedad costarricense. “Deseamos contribuir desde la Universidad y lograr una vinculación con la industria y los sectores productivos, y que en su quehacer tanto en materia de investigación como de extensión, lograr establecer un fuerte vínculo con las necesidades de desarrollo de los diferentes sectores. Contribuir, desde la Universidad, con la producción de conocimiento y propuestas que aporten al proceso de recuperación y a enfrentar los desafíos para la supervivencia de las empresas del sector turismo”, enfatizó Monge.
“Esta investigación con amplio sustento académico es de gran valor porque nos refuerza la relevancia preponderante de mantener el modelo turístico costarricense con el eje transversal de la sostenibilidad manteniendo el bienestar de los turistas nacionales e internacionales. Debemos seguir redoblando esfuerzos en aras de una recuperación gradual del sector, cumpliendo al máximo los protocolos generados para cada una de las actividades, restableciendo poco a poco la confianza en los viajeros, mientras se incrementan los procesos de vacunación, pero ante todo, debemos seguir luchando por la protección del tejido empresarial sin desmejorar la calidad de los servicios” manifestó Gustavo Segura, ministro rector de turismo.
Recuperación del turismo
De acuerdo con el estudio, la recuperación del turismo dependerá de interrelación de las crisis económica y de salud, tomando en cuenta factores como la evolución de la pandemia, la disponibilidad de vacunas, el levantamiento de las restricciones de viaje, la supervivencia y preparación de las empresas en todo el ecosistema turístico para satisfacer la demanda, los impactos en la confianza del consumidor y la evolución de la economía en general.
Según el economista Umaña, “lo que hay que tener claro es que el turismo es una industria exitosa que, por razones coyunturales, pasa un muy mal rato. Es importante que el sector financiero tenga en mente la viabilidad futura de la actividad. Necesitamos que el mayor número de empresas sobreviva la crisis.”.
Para el diseño de esta política turística, el estudio recalca que es necesario tomar en cuenta ciertas variables, tales como:
1. Sostenibilidad: La sostenibilidad puede volverse más prominente en las opciones turísticas, debido a una mayor conciencia sobre el cambio climático y los impactos adversos del turismo.
2. Turismo doméstico: Se espera que los turistas nacionales se beneficien, ya que las personas prefieren quedarse en la zona y visitar destinos dentro de su propio país.
3. Confianza: La confianza de los viajeros se ha visto muy afectada por la crisis y la incertidumbre actual.
4. Comportamiento: El comportamiento de los viajeros se verá influenciado por la evolución de la crisis, así como por las tendencias de consumo a largo plazo que están cambiando la forma en que las personas viajan.
5. Seguridad e higiene: La seguridad y la higiene se han convertido en factores clave para seleccionar destinos y actividades turísticas. Es probable que las personas prefieran «soluciones privadas» cuando viajan, evitando grandes reuniones.
6. Empresas: Es preciso rescatar al mayor número de empresas posibles, tomando en cuenta que los factores fundamentales de competitividad siguen ahí.
7. Habilidades: La escasez de habilidades en el sector turístico puede agravarse, ya que se pierden muchos puestos de trabajo y los trabajadores se reasignarán a diferentes sectores.
8. Inversión: La reducción de la inversión exigirá políticas activas para incentivar y restaurar la inversión en el sector turístico para mantener la calidad de la oferta turística y promover una recuperación sostenible.
9. Digitalización: Se espera que la digitalización en los servicios turísticos continúe acelerándose, incluido un mayor uso de la automatización, pagos y servicios sin contacto, experiencias virtuales, provisión de información en tiempo real.
El turismo en el país se destaca por proporcionar un impulso necesario para ayudar a sostener muchos destinos, pueblos y negocios, y seguirá siendo un motor clave de la recuperación en el corto y mediano plazo.
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