La escuela es un lugar de aprendizaje académico y un espacio crucial para el desarrollo social y emocional de estudiantes.
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Cada nuevo ciclo escolar es una página en blanco, llena de oportunidades para aprender, crecer y descubrir nuevos horizontes. Sin embargo, cada entrada a clases también trae desafíos que pueden generar cierta ansiedad tanto en padres como en estudiantes, razón por la cual Álvaro Solano, director de la Escuela de Psicología de Universidad Fidélitas, ofrece algunos consejos clave para asegurar el bienestar de los menores de edad durante este período:
Consejos:
1. Establezca horarios regulares para las comidas, el sueño y las tareas escolares, pues esto contribuye a la estabilidad emocional de los estudiantes y les enseña a organizarse para cumplir con sus deberes.
2. Fomente un entorno seguro, donde los niños se sientan confiados y cómodos expresando sus emociones y preocupaciones. La comunicación abierta fortalece el vínculo entre padres e hijos y les refuerza la seguridad.
3. Involúcrese en la educación de sus hijos. Asista a reuniones y actividades escolares, conozca a los maestros, esté pendiente de las circulares y apoye a sus hijos en las necesidades académicas.
4. Defina un espacio de estudio tranquilo y libre de distracciones para ayudar a los menores a desarrollar hábitos de estudio efectivos.
5. Establezca límites de tiempo para el uso de dispositivos electrónicos. Supervise el contenido al que tiene acceso en línea para garantizar un entorno seguro y saludable. Recuerde que la responsabilidad de los padres en la era digital va más allá de proporcionar dispositivos; implica guiar a los niños en un uso seguro y consciente de la tecnología, enfatiza Alvaro Solano.
6. Promueva la relaciones sociales del menor con sus compañeros fuera del entorno escolar, pues esto contribuye al desarrollo de habilidades sociales.
7. Esté atento a potenciales cambios en el comportamiento que puedan indicar estrés o ansiedad. A veces es necesario el apoyo de un profesional para ayudarle a canalizar emociones y preocupaciones.
8. Fomente un sentido de logro y motivación estableciendo metas reales para el menor. Nunca le exija en función de otros o de usted mismo.
9. Al apoyarlo con las tareas, evite enojarse y arrancar una página del cuaderno pues esto envía un mensaje equivocado a los niños sobre cómo manejar los desafíos y frustraciones. Además, siembra en ellos desaliento y pierden confianza sobre sus habilidades académicas.
Si cada vez que hay un error se les arranca una página, los niños pueden perder la oportunidad de aprender de sus equivocaciones y mejorar, señaló Solano. Es importante fomentar un ambiente en el que los errores se vean como oportunidades de aprendizaje y nunca como fracasos. Tampoco le endose a ellos sus frustraciones o emociones negativas en un acto como este, pues eso también estimula el miedo y la ansiedad.
Alertas o señales para los adultos
Existen varias señales o alertas que podrían indicar problemas o desafíos que los padres deben tener en cuenta durante el ciclo escolar de sus hijos, señala el director de Psicología de Fidélitas. Es importante estar atentos a cambios en el comportamiento o el rendimiento académico. Algunas alertas incluyen:
1. Si nota que el rendimiento académico de su hijo disminuye significativamente, podría indicar dificultades de aprendizaje, problemas de atención o falta de interés en la escuela.
2. Los cambios de comportamiento como aislamiento social, agresión, cambios repentinos en el temperamento o actitudes negativas hacia la escuela podrían ser señales de desmotivación, problemas emocionales o sociales.
3. La pérdida de peso, insomnio o fatiga constante pueden indicar problemas de salud mental como estrés o ansiedad o eventualmente alguna condición física que debería ser atendida.
4. Las dificultades para hacer amigos, los conflictos constantes con compañeros o los cambios en las relaciones sociales pueden ser indicadores de problemas emocionales o de adaptación.
5. Póngale atención a las quejas frecuentes de los maestros sobre su comportamiento, el bajo rendimiento o la falta de participación porque es probable que requiera ayuda profesional.
6. Si su hijo menciona que está siendo víctima de acoso escolar, es crucial abordar la situación de inmediato y comunicarse con los maestros o profesores y la administración escolar. Nunca ignore esta situación.
La comunicación abierta y el diálogo efectivo son esenciales para comprender las experiencias escolares de los niños, promover un entorno de aprendizaje positivo y apoyar su desarrollo integral. Padres, maestros y otros adultos responsables juegan un papel crucial en facilitar este tipo de comunicación y establecer una conexión significativa con los menores, acentuó Álvaro Solano.
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