Su actividad profesional se enfoca en la gestión y planificación fiscal del comercio internacional entre América Latina, Estados Unidos y Europa.
Por Milagros Sánchez Pinell
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Se define como un abogado que siempre quiere conocer el mundo, pero eso sí, conocerlo en su manera más profunda. Es por ello que ha dedicado veinte años de su vida a trabajar en el extranjero, específicamente en Londres, Barcelona, Nueva York, Miami y en Santiago de Chile.
Como destacado jurista, experto en Derecho Fiscal Internacional, fundó la firma de abogados tributarios Sammarco, con sede en Italia, donde brinda servicios de planificación fiscal internacional, ley de impuesto, contrato comercial, mediaciones y arbitrajes, entre otros.
Es miembro de la comisión de Derecho Europeo e Internacional del Colegio de Abogados de Roma. También, es presidente de la Asociación Gremial Chileno-Italiana, de la Asociación de Comercio Paraguay Italia y jefe del Departamento Internacional de la Cámara Internacional de Arbitraje, Mediación y Conciliación de la Asociación de Protección y Protección.
El señor Sammarco es profesor del Máster de Segundo Nivel en Planificación Fiscal Internacional en la Universidad Sapienza de Roma, donde cursó su carrera de Derecho. Además, es profesor de la maestría Listo para Exportar en la Universidad de Estudios Internacionales de Roma. Anteriormente, impartió clases en Barcelona, Santiago de Chile, Buenos Aires y Miami.
En el 2001 publicó su libro “España puente europeo hace Latinoamérica. Una visión de la planificación jurídico taxaria en la internacionalización de las empresas”. Habla italiano, inglés y español.
¿Por qué eligió estudiar Derecho?
Desde muy joven me gustó, sobre todo porque me gustaba entender bien cómo funcionaba el Estado y sus leyes. Quería entrar en esa dinámica de entender las leyes y las estructuras estatales.
¿Cuáles son sus mejores recuerdos como estudiante de Derecho?
Como estudiante de La Sapienza de Roma, a finales de los años 70 e inicio de los 80, tuve la suerte de tener los mejores profesores de Derecho que en aquel momento habían sido presidentes de la Corte Constitucional, grandes abogados y jueces muy importantes. Fue una dicha muy grande escuchar a estos grandes juristas en mis clases universitarias.
¿Por qué se interesó en el Derecho Fiscal Internacional?
Porque al segundo año de mi carrera empezó mi interés por todo lo que era el Derecho Internacional, sobre todo el Derecho Fiscal Internacional ya que me interesaba conocer cómo funcionaba la pequeña y mediana empresa en Europa y en el mundo.
¿Qué es lo que más destaca de su manera de trabajar?
Mi manera de trabajar es estudiar e intentar entender todo. También, se destaca por la honestidad, respeto, pero sobre todo por el trabajo en equipo con un objetivo en común para llegar a un resultado. Me gusta darle a mi equipo todas las nociones y los conceptos.
¿Cómo ha enriquecido su trayectoria profesional el haber trabajado en el extranjero durante más de 20 años?
El hecho de haber trabajado durante 20 años en diferentes países del mundo ha enriquecido mi trayectoria profesional porque he conocido otras leyes, otro mundo, otras maneras de razonar y de pensar. Pero, lo más importante es que estando fuera de tu país empiezas a ver y a razonar que del otro lado hay maneras de razonar y pensar diferente a tí. Eso me parece muy beneficioso.
¿Cómo nace la idea del Bufete de Abogados de Impuestos Internacionales Sammarco?
Nació después de 15 años de trabajar en el despacho jurídico fiscal del profesor Augusto Fantozzi. Así que decidí que había llegado el momento de hacer el salto solo y de crear mi estructura, eso sí, siempre trabajando en el Derecho Tributario Internacional.
¿Por qué su interés en el tema de gestión y planificación fiscal del comercio internacional entre América Latina, Estados Unidos y Europa?
Porque me interesaba conocer y trabajar con esa parte del mundo.
¿Cuáles considera que son sus mayores logros en ese campo?
Considero que mi mayor logro es la satisfacción de ver empresas italianas que se conectan o hacen fusiones con empresas europeas y empresas de América Latina para hacer negocios juntos o para trabajar en proyectos muy importantes. Creo que para un profesional que está en el campo internacional son los logros más importantes.
En estos años de trayectoria de su bufete ¿cómo calificaría la experiencia?
Es una experiencia muy grande de conocimiento de otros mundos y de trabajar junto a otros profesionales en América Latina y en Europa. Esto me ha permitido intercambiar experiencias humanas, de leyes y profesionales. Definitivamente, este intercambio de información profesional y cultural nos ha hecho crecer a todos como personas.
¿Cómo empezó su carrera como catedrático y qué lo motivó?
Empezó porque fui asistente en el departamento de Derecho Tributario de La Sapienza en Roma. Hoy en día, continuó impartiendo clases porque es una cosa que me encanta. Me gusta transmitir mi experiencia y mi conocimiento profesional a los jóvenes estudiantes. Además de eso, me gusta transmitir esa filosofía de que hay que conocer el mundo y nunca pensar que la verdad está en un solo sitio. Creo que los profesionales tienen que viajar y conocer las leyes de otros países.
¿
Qué nos puede decir de su libro?
Mi libro fue uno de los primeros escritos en castellano en el 2001 sobre el tema. En ese entonces ya se hablaba de fiscalidad internacional entre Europa y Latinoamérica y yo ya miraba y entendía que había un gran futuro, como lo sigo pensando ahora, sobre todo entre Italia y Latinoamérica.
Al final de su jornada, ¿por qué cosa en particular le gustaría ser recordado?
Por haber ayudado a estrechar las relaciones económicas, culturales y profesionales entre mundos diferentes. En este caso entre Italia, Latinoamérica y Europa. Ha sido mi esfuerzo y le he dedicado y sigo haciéndolo.
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