Al tiempo que la descentralización laboral permite cada vez más decidir dónde, cuándo, cómo y con quién trabajar, datos sobre el flujo vehicular a nivel nacional y global demuestran una tendencia al descongestionamiento.
El uso de las vías ha cambiado. Al comparar el flujo vehicular en el periodo 2015-2019, con el tránsito de automóviles entre marzo del 2020 y marzo del 2021, la flota pasó de recorrer un promedio de 46 kilómetros diarios, antes de la pandemia, a solo 35 kilómetros durante la emergencia sanitaria. El dato señala una disminución de 24% en el recorrido de los automóviles, siendo los vehículos particulares los que más redujeron su promedio diario de desplazamiento pasando de 42 km a solo 31 kilómetros. La estadística proviene del Informe del Estado de la Nación 2021, y es un reflejo de un comportamiento no solo nacional, sino global.
Para Karen Scarpetta, Regional General Manager de WeWork, es claro que el cambio de patrones de movilidad fue un fenómeno catalizado por la pandemia, sin embargo, menciona que el proceso de digitalización de los empleos y la posibilidad de trabajar remotamente, eran tendencias que venían señalando este posible cambio a escala global.
“Para la persona profesional de la actualidad, contar con un entorno flexible para trabajar desde cualquier punto es un valor clave en su bienestar laboral. Esto no solo influye directamente en su productividad, sino que ha significado un crecimiento en la demanda de espacios óptimos para trabajar de manera descentralizada. Lo que el perfil de trabajo moderno busca es contar con puntos en los que haya condiciones ideales para desempeñarse adecuadamente, sin la necesidad de trasladarse grandes distancias”, explicó Scarpetta para quien resulta notorio cómo la oportunidad de escoger desde donde trabajar, ha influido fuertemente en la reducción de la intensidad de uso de los vehículos particulares.
Esta idea de que las tendencias de movilidad se encuentran en un punto de inflexión es respalda por el informe del 2021 llamado Índice de Movilidad Urbana de Deloitte (DCMI), que se planteó comprender cómo se mueven las personas en los entornos urbanos tomando en cuenta los paradigmas de las grandes ciudades alrededor del mundo.
La investigación de la firma internacional señalaba que, al tiempo que las ciudades del mundo empiezan a retomar su cotidianidad después de la pandemia, los sistemas de transporte se han abierto a considerar nuevas dimensiones de la movilidad que deben tenerse en cuenta para afrontar el futuro, ya que las circunstancias actuales ofrecen oportunidades para un replanteamiento de las maneras de circular de las personas.
Una de estas potenciales oportunidades de “ajuste de la movilidad” es protagonizada por los centros de trabajo descentralizados que se propagaron a partir de las restricciones sanitarias para circular potenciadas por el COVID-19. Como explica Scarpetta, empresas como WeWork brindan servicios a sus socios para que, ya sea dentro del territorio nacional o fuera de él, puedan disfrutar de las ventajas ofrecidas por una red internacional de oficinas, por medio de membresías, como la denominada “All Access”, que surgió tras identificar estas nuevas dinámicas de movilización.
“Un producto como el denominado “All Access”, lanzado en el mes de mayo en Costa Rica -explica Scarpetta-, brinda la opción a cualquier persona de asistir a trabajar a 800 posibles oficinas en 154 ciudades alrededor del mundo, evidencia la demanda del trabajador actual de poder elegir el lugar de trabajo que mejor le convenga, según su ubicación en determinado momento. Lo cual se traduce en un impacto directo, en el flujo vehicular, en los países en los que se ofrece este tipo de sistemas.
Descogestionamiento global
La reducción del tránsito vehicular es una tendencia internacional. Un estudio de la empresa de tecnología de navegación Tom Tom, reveló que la congestión del tráfico en las ciudades de todo el mundo ha sido un 10% menor que el año de referencia comparativa de 2019, algo que sucedió en al menos 283 de las 404 ciudades encuestadas, las cuales experimentaron menos tráfico en promedio que antes de la pandemia; esta caída del tráfico de vehículos fue aún más notable en las horas punta, donde los niveles de congestión se redujeron en un promedio de 19%, según la encuesta realizada por la empresa de tecnológica.
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