Al trabajar con emprendedores en las primeras etapas de sus empresas, es fundamental enfatizar la importancia de codificar tanto planes a corto como a largo plazo.
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En la era digital actual, abundan los conceptos sobre lo que se necesita para convertirse en un líder excepcional: tenacidad, determinación, autenticidad… la lista continúa. Se ha hablado extensamente sobre la icónica obra de la psicóloga Angela Duckworth, titulada acertadamente Grit.
Sin embargo, es importante destacar un matiz sutil en la palabra que con mayor frecuencia se usa para describir a los líderes excepcionales: resiliente. La resiliencia es fundamental. Es la cualidad que permite sobrevivir, como una cucaracha, atravesando los momentos más difíciles y emergiendo intacto del otro lado. En períodos tumultuosos o en mercados en rápida evolución—como el actual panorama impulsado por la inteligencia artificial—la resiliencia por sí sola es insuficiente. La cualidad que supera a la resiliencia es la adaptabilidad.
La adaptabilidad es clave para el verdadero éxito en el liderazgo. Más que sobrevivir, se trata de transformarse: empezar como una mariposa y emerger como un dragón. Charles Darwin lo expresó a la perfección: Mientras que la resiliencia permite resistir la tormenta, la adaptabilidad otorga la capacidad de aprovechar su energía y dirigirla hacia un crecimiento sin precedentes. Se trata de prosperar en medio del caos y evolucionar hasta convertirse en la mejor versión de uno mismo. A continuación, se presentan algunos ejemplos de resiliencia en acción.
FORTALECER LA ARMADURA MENTAL
¿Quién mejor para hablar sobre fortaleza mental que una atleta olímpica que entrenó en temperaturas bajo cero, lanzándose desde cimas montañosas a velocidades de 160 kilómetros por hora? Como lo expresó la medallista de oro olímpica Lindsey Vonn en una entrevista: “Al final de mi carrera, físicamente era menos de la mitad de la atleta que solía ser, pero mentalmente, me había convertido en tres veces la atleta que era antes”.
La carrera de Vonn estuvo lejos de ser sencilla. Enfrentó numerosos contratiempos y lesiones graves que la mayoría de las personas dejaría de soportarlo, pero su madre le inculcó la importancia de encontrar lo positivo en cualquier situación. Atribuye a esta actitud su capacidad para desarrollar la fortaleza mental que la impulsó hacia adelante.
Desde muy joven, decidió que quería ser la mejor esquiadora de todos los tiempos. Una vez que se establece un objetivo, es esencial recordar esa meta cuando se enfrenta un desafío y preguntarse: ¿Cómo puedo reformular esta situación como una oportunidad para acercarme a mi meta? Los contratiempos son inevitables. El cambio es inevitable. La capacidad de Vonn para reformular la adversidad y utilizarla como una oportunidad de crecimiento es una poderosa lección sobre un liderazgo diferenciado y adaptable.
CONSTRUIR UN PLAN DE TRABAJO A CINCO AÑOS
Al trabajar con emprendedores en las primeras etapas de sus empresas, es fundamental enfatizar la importancia de codificar tanto planes a corto como a largo plazo. Los líderes y empresarios más exitosos son aquellos que pueden articular claramente su visión y han establecido una hoja de ruta de cinco años para alcanzar sus objetivos. Estos planes cambiarán y evolucionarán, a veces a diario. Pero cuando surgen problemas, un plan a cinco años permite contextualizar rápidamente la nueva información y preguntarse nuevamente: ¿Cómo puedo seguir avanzando en mi plan a cinco años en este momento?
En el ámbito deportivo, se enseña a ver todo el campo de juego, a levantar la cabeza y aprovechar cualquier error del oponente. Estos mismos principios se aplican en los negocios. Cuando se sabe hacia dónde se quiere ir y se tiene una visión clara del panorama (un plan de negocios). Se pueden ejecutar rápidamente los siguientes pasos y desarrollar la adaptabilidad a una velocidad que aquellos sin un plan a largo plazo simplemente imposible de igualar.
MANTENER LA CALMA EN MEDIO DEL CAOS
Como es bien sabido, el éxito nunca ocurre en aislamiento. Se puede ser un líder dentro de una empresa, pero cada movimiento está respaldado por un equipo. En tiempos de incertidumbre, los líderes más adaptables pueden inspirar a su equipo para que sean la mejor versión de sí mismos y ayudarles a manejar el estrés con aplomo.
¿Cómo lograrlo? El primer paso es liderar con el ejemplo. Un caso ilustrativo es la experiencia de una emprendedora que vendió su primera empresa, LearnVest, la misma semana en que esperaba el nacimiento de su primer hijo (la venta ocurrió un miércoles y entró en labor de parto ese mismo fin de semana).
En ese momento de su vida, nada podría haberla preparado para gestionar un cambio tan profundo en tan pocas horas. Sin embargo, descubrió una nueva versión de sí misma: una capacidad extraordinaria de mantenerse serena, enfocada y meticulosa ante un desafío de gran magnitud.
En lugar de dejarse debilitar por el estrés, lo utilizó como un catalizador para potenciar sus habilidades. Ajustó su enfoque operativo y estratégico, y redobló su capacidad de análisis crítico en cada decisión tomada. Encontró confianza en la preparación y en el compromiso de todo su equipo.
Al igual que la estrategia de Lindsey Vonn, el equipo se mantuvo enfocado en la misión. Los líderes adaptables ignoran el ruido de la duda y la distracción y se centran en los caminos que los conducen a sus metas, en lugar de en los obstáculos que deben superar para llegar allí.
Fuente: Fast Company
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