¿Los niños están perdiendo capacidad motriz por el uso excesivo de pantallas?

Sin embargo, muchos padres de familia han expresado su preocupación al respecto, pues perciben que sus hijos pequeños estarían perdiendo habilidades motoras, en especial las habilidades motrices finas.

Se trata, pues de los movimientos sutiles precisos necesarios para, por ejemplo, atarse los cordones, escribir con un esfero o construir una torre de legos. Expertos aseguran que esto se puede deber a una mezcla entre el tiempo al frente de las pantallas, hábitos cambiantes y un cambio en las experiencias durante la infancia.

Apuntan a que la pandemia tiene un alto grado de responsabilidad en esta situación. En un estudio realizado con más de 250 bebés nacidos durante el primer año de esta se obtenían puntuaciones más bajas en pruebas de motricidad fina que en bebés nacidos antes de la pandemia.

Según Lauren Shuffrey, una de las investigadoras que participó en el estudio, es complicado saber a ciencia cierta si estos resultados se deben a un mayor estrés prenatal o al entorno distinto que los bebés pandémicos vivieron en sus primeros meses de vida.

El hecho de que los padres trabajen en casa generó un incremento del tiempo de pantallas para niños de todas las edades, algo vinculado a los retrasos  en las habilidades motoras finas: «Los padres hacían lo que tenían que hacer en circunstancias poco ideales«, asegura la investigadora, citada por ‘Natgeo’.

Steve Barnett, codirector del Instituto Nacional de Investigación en Educación Temprana de la Universidad de Rutgers (EE. UU.), asegura que esta tendencia es previa a la pandemia por covid-19: «Es algo que viene de lejos».

El tiempo que los niños se la pasan frente a pantallas (celulares, televisores, tablets) se añade al tiempo que se dejan de dedicar a las manualidades, el dibujo o la construcción. Pese a que aprender matemáticas o crear arte digital puede ser educativo, sin el desarrolla lo suficiente el control de la motricidad fina que se logra conseguir escribiendo o coloreando.

Otro de los factores mencionados es la comodidad en la crianza. Según Hornbeck, artículos como prendas de vestir sin cremalleras o botones ahorran tiempo en las mañanas, sin embargo, esto priva a los niños de fortalecer su motricidad.