Este amante de la naturaleza tuvo su primer cargo en el COI en 1989, en la Comisión de las Nuevas Fuentes de Financiación, para luego coordinar los Juegos Olímpicos de Atlanta, en 1996, desde esa fecha ha tenido una larga trayectoria en ese organismo, donde ha ocupado puestos como miembro de la Junta Directiva, director de Protocolo, integrante de las Comisiones de Prensa, de Relaciones Internacionales, de los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016 y de Evaluación para futuras sedes de sesiones del COI.
Kaltschmitt pasa su vida entre sus empresas y su labor en el COI; por eso, su tiempo libre lo aprovecha compartiendo con su familia y amigos, además de practicar deportes como la pesca y el buceo, y como es piloto de aviación, le gusta volar y en ocasiones navega.
“Disfruto mucho la música, sobre todo la música latina, soy músico aficionado de la percusión”, comenta el dirigente del COI.
Como dice él: “Definitivamente, hay que organizarse para que la agenda profesional y la del Movimiento Olímpico estén coordinadas en todas mis actividades”.
El ser el único centroamericano en la Junta directiva del COI representa una gran responsabilidad para Kaltschmitt, que con su labor le brinda un apoyo a los Juegos Deportivos Centroamericanos y trata de inculcar los valores olímpicos en los diferentes países, “además de trabajar con la juventud de áreas marginales, como lo estamos haciendo en Guatemala, a efecto de que el deporte y los valores olímpicos sean una herramienta útil para combatir la delincuencia que tanto afecta a la juventud”, asegura.
Deporte en el área
Por su trabajo en el COI, Kaltschmitt tiene una visión más amplia del nivel del deporte mundial, y con conocimiento de causa es que afirma que “el deporte centroamericano ha subido de categoría, sin embargo, muchos países del área no reciben suficiente apoyo de sus gobiernos para invertir lo que hoy en día se necesita, como en infraestructura de financiamiento y preparación de aquellos atletas que tienen cualidades para llegar a ser deportistas de alto nivel”.
Para que aumente ese nivel, según el dirigente, es necesario que el deporte sea en todos los gobiernos de Centroamérica una prioridad por los beneficios que brinda a sus habitantes.
El ciclo olímpico es otra forma que tienen los atletas de subir de nivel al estar en constante competencia. Este tiene una duración de cuatro años, inicia en el caso de Centroamérica, Panamá y Belice con los Juegos Centroamericanos (7 países), Juegos Centroamericanos y del Caribe (32 países), Juegos Panamericanos (42 países) y, por último, Juegos Olímpicos (205 países), dice el guatemalteco.
“Conforme avanza el Ciclo Olímpico el nivel competitivo es más exigente, por lo que la participación en los juegos mencionados es vital para optar por mejores resultados en campeonatos mundiales y/o para clasificación a los Juegos Olímpicos”, explica Kaltschmitt.
“Para estos eventos, los Comités Olímpicos Nacionales reciben apoyo financiero y becas para atletas del Comité Olímpico Internacional y de la Organización Deportiva Panamericana (Odepa)”, añade.
A pesar de eso se necesita aún más inversión para que ese esfuerzo se vea reflejado en más medallas en las Olimpiadas.
“Hoy los Juegos Olímpicos reúnen lo mejor del mundo y, por lo tanto, ya solo clasificar para unos juegos es algo sumamente difícil, ganar una medalla es aún más difícil pues se compite con países que económicamente invierten millones en sus deportistas. En otras palabras, hay que invertir mucho en un deportista en todo sentido para que pueda competir en igualdad de condiciones”, detalla.
En cuanto a la dirigencia centroamericana, Kaltschmitt afirma que ahora se capacitan para ejercer su trabajo.
“Creo que la mayoría de los dirigentes deportivos de Centroamérica son personas con muy buenas intenciones que trabajan ad honorem para el deporte, y que cada vez más se han capacitado para ejercer sus cargos de una forma más eficiente”.
Contra el dopaje
El dopaje es uno de los problemas que ha combatido este guatemalteco desde su trinchera en el COI y como fundador de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).
“Creo que a partir de la creación de esta organización, se ha avanzado muchísimo en el control del dopaje en los Juegos Olímpicos y en otros eventos regionales. El Código Mundial Antidopaje ha sido adoptado y es respetado por todo el Movimiento Olímpico, federaciones internacionales y gobiernos, lo que asegura la aplicación del código a todo nivel”, añade.
Él asegura que los gobiernos también han contribuido en este trabajo al emitir legislación que penaliza legalmente el uso de sustancias para mejorar el rendimiento.
“Hay una serie de medidas como las pruebas que se hacen a los atletas fuera de competencia, y programas de educación para prevenir el uso de dichas sustancias”.
Sueño olímpico
Ahora la atención del COI está puesta en los próximos Juegos Olímpicos Río de Janero 2016, donde debutarán los deportes de golf y rugby. Sin duda alguna esto representa un gran compromiso para Brasil.
“La organización de los Juegos Olímpicos es uno de los mayores retos que puede tener un país; lógicamente, surgen problemas de toda índole por lo compleja y demandante que es llevarlos a cabo. Sin embargo, al final las ciudades cumplen, creo que los Juegos de Río van a ser unos buenos juegos”, asegura Kaltschmitt.
Precisamente, esa complejidad de organizar unas justas olímpicas es lo que hace difícil que en algún momento se hagan en algún país centroamericano.
“Es muy difícil, por la envergadura de organización que exigen estos juegos, especialmente en el tema económico. Organizar unos Juegos Centroamericanos y del Caribe, y Juegos Panamericanos, ya está limitado a pocos países. Sin embargo, es un sueño que no debemos descartar”, concluye Kaltschmitt.
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