17 abril, 2017

Voluntariado, un compromiso con los demás

Karla Echavarría septiembre 2, 2014

Partiendo de su definición más sencilla, el voluntariado es el trabajo de las personas que sirven a una comunidad o al medio ambiente por decisión propia, libre y sin cobrar por su trabajo.

El voluntariado tiene el potencial de transformar la vida personas y comunidades enteras. Su aporte, tanto ciudadano, como corporativo es hoy vital en nuestros países. Ciertamente, las
empresas pueden potenciar sus impactos positivos, impulsando iniciativas de voluntariado profesional y más estratégicas.

En un reciente informe, la Organiazción de las Naciones Unidas (ONU) enfatiza que el voluntariado es una forma poderosa de involucrar a los ciudadanos para hacer frente a los desafíos en materia de desarrollo, capaz de transformar el ritmo y la naturaleza del mismo.

Además, fortalece la confianza, la solidaridad y la reciprocidad entre las personas y crea oportunidades de participación apropiadas.

Programas de ayuda social, como servicios médicos gratuitos, son parte de las acciones del nuevo voluntariado.

En sus primeros años, la responsabilidad social empresarial se centraba mayormente en acciones de filantropía; es decir, ayudar a otros sin requerir una respuesta o algo cambio.

Hoy en día, acciones tales como dedicar solo unas horas al mes o al año para pintar una escuela o un parquecito o limpiar la ladera de un río, ya no son suficientes. Las empresas y los conglomerados corporativos están llamados a realizar acciones más integrales, que pueden empezar a lo interno, generando cambios que posteriormente impacten también a la comunidad donde funcionan.

“El voluntariado es un excelente instrumento para mejorar la motivación y compromiso de los colaboradores con la empresa, y su contribución a las comunidades donde opera. Sin embargo,
la responsabilidad social de la empresa va mucho más allá de estos aportes puntuales, pero importantes, que puedan desarrollar por medio del voluntariado”, enfatiza Aitor Llodio, director ejecutivo de Aliarse para el Desarrollo Costa Rica

Las nuevas tendencias de RSE indican que, para contribuir socialmente y a largo plazo, las empresas deben identificar de manera puntual un proyecto social al que le pueden ayudar, pero desde su ADN, es decir desde la misma razón de ser de la empresa.

En el caso de Walmart, el tema del voluntariado se ha fortalecido y cuenta con iniciativas de largo alcance en el tiempo.

“Durante el 2016, desarrollamos más de 35.000 horas voluntarias a nivel de Centroamérica, lo cual se traduce en más de 9.000 asociados apoyando de manera íntegra a nuestros proyectos de
inversión social, como los Bancos de Alimentos, a través de actividades de recolección de víveres y talleres de nutrición.

En los programas de empoderamiento de mujeres, a través de mentoras y por cada apertura de tienda que tenemos, se realiza una actividad de voluntariado, atendiendo alguna necesidad de la
comunidad donde operamos y esto nos acerca más a conocer a nuestros clientes”, afirma Yolanda Fernández, directora para Centroamérica, de RSE de Walmart.

Karen Wantland, consultora de Sostenibilidad en Guatemala afirma que “el voluntariado es una oportunidad para que las empresas vinculen aún más a sus colaboradores con el espíritu de una compañía; sin embargo, esto debe hacerse como una actividad que se relacione con las estrategia de la empresa. Otro aspecto a considerar, es que el voluntariado debe ser voluntario y no obligatorio, como sucede en algunas compañías que exigen a sus trabajadores a ir al voluntariado un fin de semana, por ejemplo”.

Por esa razón, el voluntariado corporativo es una expresión de la Responsabilidad Social que tiene como finalidad facilitar la movilización del talento y energía del personal de una empresa a favor del desarrollo social de las comunidades donde ésta se desarrolla a diario.